"Conocer" la prosperidad 2

“Conocer” la prosperidad

Uno de los aspectos más desafiantes de aprender a atraer la prosperidad es la capacidad de “saber” que eres próspero – ¡incluso cuando todavía no te sientes como si lo fueras!

Cuando tus circunstancias externas siguen reflejando la ilusión de carencia, es fácil frustrarse porque crees que tus intentos de atracción no están funcionando. Sin embargo, ¡esa misma frustración es la que te mantendrá encerrado en el ciclo de la carencia!

Para salir de la ilusión de la carencia, tienes que utilizar el poder de tu voluntad para disminuir la energía que has invertido en ella previamente. ¿Cómo inviertes energía en la creación de la carencia?

– Pensando constantemente en ella y centrándose en ella.

– Afirmando constantemente que existe en tu vida.

– Quejándote de ella a los demás.

– Identificándote con la carencia que ves en el mundo que te rodea.

Cuanta más atención y energía le das a la existencia de la carencia, más carencia atraes hacia ti.

La buena noticia es que también puedes utilizar este mismo proceso para atraer la abundancia y la prosperidad a tu vida, ¡excepto que te enfocas en el extremo opuesto del espectro!

– Piensa y enfócate constantemente en la abundancia y la prosperidad. Sin embargo, NO desde un lugar de necesidad, miedo o ansiedad – sino desde un lugar de alegría, confianza y optimismo de que ya es tuyo.

– Afirma constantemente que eres un imán natural de prosperidad, y que la gran abundancia fluye en tu vida con facilidad y frecuencia.

– Comparte con los demás las cosas maravillosas que te ocurren. En lugar de quejarte de las cosas malas, comparte las buenas y anima a las personas de tu vida a hacer lo mismo.

– Presta atención a la gran abundancia que te rodea en todo momento. Esto incluye las posesiones materiales, las personas y las bendiciones que tienes en tu vida, pero también las expresiones de abundancia que encuentras en el mundo.

En lugar de sentir envidia de las personas ricas y exitosas, imagina que el universo acaba de sostener un espejo para hacerte saber que TÚ también puedes ser igual de rico y exitoso.

Lo más importante es que desarrolles el “conocimiento” interno de que puedes ELEGIR la prosperidad y la abundancia, con la misma facilidad con la que elegiste la carencia y la lucha.

Puede que no creas que has elegido la carencia y la lucha (¿quién en su sano juicio lo haría?) – pero es muy posible elegir por defecto. A menos que elijas conscientemente ser próspero, es como sentarse en el asiento trasero de tu coche y esperar que te lleve a tu destino deseado. Tienes que ponerte al volante y conducir. 🙂

Intenta recitar esta afirmación varias veces al día:

“SÉ que soy un creador poderoso por derecho propio, y ELIJO el flujo armonioso de prosperidad y abundancia AHORA”.

Cuando empieces a decirla, probablemente sentirás que estás mintiendo. Eso es porque en el fondo, realmente no “sabes” tal cosa. Pero sigue haciéndolo. Sigue diciendo la afirmación con fuerza y poder y convicción en tu voz, y realmente empezarás a creerla.

Y es entonces cuando todo en tus circunstancias externas comenzará a cambiar hacia la prosperidad y la abundancia que “sabes” que mereces.

 

Comparte